Libro: Mil veces hasta siempre, John Green

 

Título: Mil veces hasta siempre

Título original: Turtles All The Way Down

Autor: John Green

Saga: no, es autoconclusivo

Género: novela, juvenil, realismo

Editorial: Nube de Tinta

Nº de páginas: 298

Año: 2017

Encuadernación: tapa blanda con solapas

País: Estados Unidos

Traducción: Noemí Sobregués

Sinopsis:

Aza nunca tuvo intención de investigar el misterio del multimillonario  fugitivo Russell Pickett. Pero hay una recompensa de cien mil dólares en  juego y su mejor y más intrépida amiga, Daisy, no está dispuesta a  dejarla escapar. Así, juntas, recorrerán la corta distancia y las  enormes diferencias que les separan del hijo de Russell Pickett, Davis.

Aza lo está intentando. Trata de ser una buena hija, una buena amiga,  una buena estudiante y, tal vez, incluso una buena detective,  mientras  vive en la espiral cada vez más estrecha de sus propios pensamientos, una y mil veces hasta siempre.

Mi opinión:

La protagonista y narradora de esta novela es Aza Holmes, una chica adolescente que sufre de TOC y ansiedad y tiene pensamientos obsesivo que no puede controlar. Y por si fuera poco, junto a su amiga Daisy se va a meter en un embrollo relacionado con la desaparición del multimillonario Russell Pickett, el padre de Davis, el chico que le gusta.

Para empezar, creo que la sinopsis te da una idea equivocada de la historia. No es una novela policiaca, aunque pueda dar esa impresión. De hecho, o de la desaparición de ese hombre es una subtrama que se mantiene en segundo plano todo el tiempo, y no esperéis nada parecido a una investigación.

¿Y entonces de qué va el libro? Pues se entra en el día a día de Aza, sus alegría y preocupaciones y cómo convive con sus trastornos mentales. Y es que la salud mentales es tema principal del libro,  el autor nos lo muestra metiéndonos en la cabeza de su protagonista.

Para mí, eso es lo mejor de esta novela. No es sólo que Aza sea la narradora, sino que estamos dentro de su mente. Vemos cómo funcionan sus pensamientos y cómo lidia con obsesiones que no puede controlar. De hecho, mis partes favoritas del libro son los monólogos interiores de Aza, que aparecen en sus momentos de mayor crisis. Ya no es Aza contando lo que le pasa, sino que leemos sus propios pensamientos. Es cómo una discusión entre dos voces, la racional y la irracional. De hecho, puede resultar angustiosos de leer, porque es cómo si nosotros mismos fuéramos Aza y tuviéramos sus mismos pensamientos. Esto te permite empatizar perfectamente con la protagonista, y comprender cómo funciona su modo de pensar.

Aza me ha parecido un personaje fantástico. Como he dicho anteriormente, no cuesta nada empatizar con ella porque conocemos en profundidad su mente y sus pensamientos. Además, creo que ejemplifica muy bien cómo no estigmatizar a los enfermos mentales: ella no está loca, quiere llevar una vida normal y tranquila, estudiar, estar con su mejor amiga, tener novio... Y hace lo que puede por mejorar su situación, a pesar de lo difícil que le resulta. Yo conecté con ella desde el minuto uno.

En cuanto a los secundarios, destacaré a Daisy y a Davis. En muchas novelas juveniles, la mejor amiga de la protagonista es un florero que aparece en os tres primeros capítulos para aconsejarla sobre qué vestido ponerse para su primera cita. Bueno, pues aquí no sucede eso. La relación entre Aza y Daisy está muy bien desarrollada y se siente totalmente real. Tienen sus problemas y discusiones, pues resulta difícil mantener la amistad con alguien que tiene unos problemas tan severos, pero se profesan un afecto sincero. Y esto ya es personal, pero me hizo gracia que Daisy fuera fan de Star Wars y estuviera haciendo referencias a la saga y teniendo discusiones frikis al más puro estilo The Big Bang Theory.

Davis me ha parecido un amor. Es un chico de lo más dulce y adorable, y lo que más me gustó de él es que respeta a Aza y nunca la presiona acerca de su relación, porque es consciente de que necesita espacio debido a sus problemas de salud. El romance entre ambos es muy realista y bonito, y tienen una gran química. Es muy complicado teniendo en cuenta la situación de Aza, y no es una historia de amor de cuento de hadas.

El final me ha gustado muchísimo por la sensación agridulce que te deja. Es como la vida misma: algunas problemas se puedan resolver, pero hay heridas que nunca  cerrará del todo. Son embargo, no queda otro remedio que seguir adelante Me pareció totalmente real.

En conclusión, Mil veces hasta siempre es una novela que refleja de manera muy vívida el TOC, con una protagonista muy bien desarrollada y una forma de narrar magistral.

Lo mejor: Los monólogos interiores.

Lo peor: Sigo prefiriendo Bajo la misma estrella.

Calificación: 4'5/5 💓💓💓💓💔

Excelente.

Cita:

"Cualquiera puede mirarte. Pero muy pocas veces encuentras a alguien que ve el mismo mundo que estás viendo tú".